martes, 17 de marzo de 2009

ANTOJOS DE LA LOWY...

DESCRIPCIÓN
FÍSICA

Sobre unos botines deportivos blancos y negros de lunares estampados, comienza en orden ascendente la descripción física de Alba García, estudiante de 1º de Comunicación Audiovisual. Alba viste vaqueros morados ajustados, blusa negra y camiseta banca a juego con reloj y deportivas. A semejanza de sus aros plateados, lleva pulseras brillantes en ambas muñecas, algunas con detalles en azul Klein. Más arriba, sus gafas de pasta roja translúcida sobresalen alegremente sobre su expresión sugerente, aliñada con un desenfadado recogido en el pelo al que horquillas dispersas añaden claridad. Macedonia de sofisticación y sobriedad a partes iguales.

UN DOMINGO
CON ALBA

El día de ayer, Alba amaneció soñolienta tras un sábado frenético en tierras valencianas. A las ocho de la mañana tomó un autocar en dirección a Madrid, a donde llegó alrededor de la una. Tras dar una vuelta por la Plaza de España, acudió a su cita con las judías blancas de su abuela Antoñita, famosa por su pericia en los fogones. Tras lidiar con la ingente cantidad de comida, no quedó otra alternativa que reposar un poco el cuerpo en una siesta que se alargó hasta bien entradas las seis de la tarde. A continuación, Alba bajó a la calle a pasear a su perro Lucas mientras permanecía profundamente sumida en sus pensamientos de cara a los no pocos trabajos de la sita Lowy. A la vuelta del paseo, se puso el mono de trabajo, bolígrafo en ristre y manos a la obra en aras de la gran hazaña de satisfacer las múltiples peticiones con las que la profesora nos salva de consumirnos espiritualmente de mortífero aburrimiento. Tras un par de horas en la cuestión, Alba pudo comprobar cuán divertidos son estos trabajos que cada día nos salvan de las garras de la holgazanería y la ociosidad, y que un lunes tras otro nos rescatan del absentismo por su entretenida practicidad. Tras el primer cuatrimestre, a Alba se le ocurre que es una gran suerte que las clases de Periodismo hayan ido a caer al lunes y al martes, convirtiendo el fin de semana en un extra de horas libres muy oportuno para realizar las prácticas de Comunicación e Información Escrita. Tras la sesión periodística, llegó el momento del bocadillo: lomo con pimientos al más puro estilo Carmen, y a mí se me hace la boca agua sólo de pensarlo. A penas duró unos instantes el bocadillo en manos de Alba, que había hecho hambre entre declaraciones y noticias. Finalmente, Aída protagonizó la recta final de la jornada, en cuyo humor ácido y popular depositó Alba sus últimas gotas de atención. Tras un día completo, cogió la cama con algo más que ganas, durmiendo profundamente hasta que el despertador salió a trabajar.

2 comentarios:

tuky_matt dijo...

me has matado, sinceramente.

esta lowy...

tuky_matt dijo...

Es que yo creo que lo único que se curraron de la peli fue el cartel, porque nos quedamos todos flipando con quienes actuaban, para después encontrarnos con semejante "pelicula"...hay que ver hay que ver.

Y encima casi muero cuando entramos todos a tropel ahi dentro...si lo llego a saber...