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Ya ves, quizá la clave de la vida, la respuesta a todas las preguntas, la llave maestra de todas las puertas que con el viento se me cierran, quizá tal jeroglífico nos aparezca continuamente en toda la careta sin que seamos mínimamente conscientes de ello, y mucho menos aún de descifrarlo. Sin embargo, en aquel momento en el que la magnánima evolución humana nos permite apenas saborear unas gotas de su esencia, nos postramos en el trono, a fumar un pitillo especiado con kilos y kilos de insoportable arrogancia que, embebidos en nuestro propio triunfo insuperablemente efímero, nos mantiene embelesados cual bebé con sonajero. Sólo son momentos, etapas, dame una vida eterna y te pondré veintiunmil pegas, dame un ferrari y lloraré por otra cosa. Incluso, si quieres, dame un papel de bohemio ruso empedernido por el opio, y entonces buscaré algo para llorar, haciendo gala de la irreconciliable insatisfacción humana. Los versos sólo arreglan noches, como los ferrari, pero más baratos, y vedados a las mágicas esencias que nos visitan apenas un par de veces en la vida. Pluriempleado en quejas es el adolescente de hoy, siempre en busca de algo que no soy, siempre en defensa de un perfil, no de un sentir. Apología contra los pseudo-revolucionarios, dicen las paredes de la habitación de la locura, apología contra ellos por quiméricos y cobardes. Buscar la erudición sólo alcanza a unos pocos alegres chiflados que, desde el principio, fueron diferentes. En el futuro, espero ganar, ser feliz, y como dijo una gran canción … “basta de lamentos, brindemos…”.
Nunca olvides que el humo marea, no soluciona.
Pasión, hielo y recuerdos
Que no se olvide nunca
El tiempo de faltarme,
Pues ahí cuando me sobre,
Vendrá tu recuerdo a buscarme.
Que la lluvia es transparente,
Que el tiempo es mi mentira,
que la música es guerra, y es paz
En cada batalla que solo y desarmado
libro contra el brillo de tu recuerdo.
Mientras luces de la niñez
me atisban el futuro,
Viene el nuevo “tú”
Y lo convierte en oscuro.
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Lágrimas y sueños
Quizá en la noches clara
El viento nos ayude
Llevando nuestros nombres
Volando hasta las nubes.
Verdes cristales llenos de estrellas,
Guardan los trozos de sueños pasados,
Busco un lugar donde ver cosas bellas,
Allí donde yazcan los héroes olvidados.
Sueña que nos quedamos,
Juntitos a la lumbre,
La eterna lumbre azul,
Que de Amsterdam a Estambul,
Para siempre de la mano
Nos lleve a vivir a la cumbre
No tengo más deseos
Que poder vivir el sueño
de convertir en realidad
lo que ya te dije de pequeño.
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Eternas vidas
El sueño se me quita
La noche se hace vida
La vida se hace muerte
La muerte, mi mentira,
Y a mi mente desvaría.
Engánchate a mi mano,
Tomemos la salida,
Huyamos a otro lado,
Cambiemos ya de vida.
Siéntate en mis piernas,
Entra ya en mis brazos,
Solo quiero darte
La vida en mil abrazos.
